La banca electrónica o por Internet forma parte, desde su implementación en 2012, de las
nuevas tecnologías para empresas que ayudan a mejorar su eficacia, optimización de procesos y rentabilidad, entre otros beneficios.

Creada con el fin de acercar los productos y servicios a más clientes o usuarios,
la banca electrónica implica el desarrollo de servicios y operaciones que facilitan la gestión de cobros y nóminas, operaciones internacionales o gestión de excedentes de tesorería, entre otros, por lo que aporta importantes ventajas a empresas innovadoras, como:
- Uso personalizado. Un empresario puede llevar a cabo la administración financiera de acuerdo con sus necesidades y las de su compañía.
- Servicio 24 horas. Disposición de los servicios bancarios durante todo el día y todos los días del año, en los que se pueden realizar todo tipo de consultas, gestiones y operaciones.
- Oficina móvil. Este servicio y modalidad permite operar desde una computadora en la oficina y a través de dispositivos móviles, como los teléfonos inteligentes o agendas electrónicas personales (PDA).
- Fácil empleo. Estos sistemas están diseñados en función de la intuición del usuario y es muy sencillo familiarizarse con ellos. Por lo que es de fácil navegación.
- Reduce costos y tiempos. Los servicios online disminuyen las comisiones y ofrecen interesantes promociones de lanzamiento de productos. Además, se evitan desplazamientos para realizar operaciones habituales, con el consiguiente ahorro de tiempo.
A través de la banca electrónica es más sencilla la administración financiera de una empresa en general, pues permite llevar a cabo un control y seguimiento de su tesorería en tiempo real mediante consultas de saldos, traspasos de fondos, transferencias entre cuentas y gestión de domiciliaciones; operaciones que son habituales en cualquier compañía.
Fuentes: Forbes, Educastur, Banco de México.